Durante los primeros dos meses de 2025, el sector de vehículos de carga en México sufrió una baja considerable en ventas, manufactura y exportaciones, debido en gran parte a la incertidumbre provocada por las amenazas de aranceles del gobierno estadounidense. Esta circunstancia ha influido tanto en el mercado local como en el extranjero, demostrando la vulnerabilidad del sector frente a las políticas comerciales globales.
Descenso en ventas nacionales
Ventas internas en declive
Impacto en producción y exportación
La fabricación de vehículos pesados en México también sufrió un impacto, con una reducción del 27.5% en febrero de 2025 en comparación con el mismo mes del año anterior, de acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Asimismo, las exportaciones disminuyeron un 23.9% en ese mismo periodo, lo que muestra claramente el efecto de la incertidumbre arancelaria en el comercio exterior de esta industria.
Afectación en el empleo y la economía
La reducción en la industria de vehículos pesados impacta directamente el empleo, perjudicando a miles de trabajadores en las fábricas y en la cadena de suministro. Asimismo, la baja en la actividad del sector podría repercutir en otros aspectos de la economía, como el transporte y la logística, aumentando los costos operativos y afectando la competitividad de las empresas dentro de México.
Reacción del sector empresarial
Frente a esta situación, dirigentes empresariales han expresado su inquietud y han solicitado al gobierno mexicano mejorar las relaciones diplomáticas con Estados Unidos para prevenir la aplicación de aranceles que puedan empeorar el escenario actual. La cooperación entre el sector público y privado es crucial para desarrollar estrategias que amortigüen el impacto de la incertidumbre arancelaria y favorezcan la estabilidad en la industria.
Proyecciones a corto y mediano plazo
Perspectivas a corto y mediano plazo
Si bien la situación actual es desafiante, existen oportunidades para que la industria de vehículos pesados en México se adapte y busque nuevos mercados. La diversificación de exportaciones hacia otros países y regiones puede ser una estrategia viable para reducir la dependencia del mercado estadounidense. Además, la inversión en innovación y tecnología puede mejorar la competitividad del sector a nivel global.