Gustavo Petro establece impuestos temporales para atender la crisis de violencia en el Catatumbo

El mandatario de Colombia, Gustavo Petro, ha establecido dos tributos temporales con el fin de financiar acciones destinadas a enfrentar la crítica situación de violencia en la zona del Catatumbo, localizada en el noreste del país. Esta decisión se tomó después de decretar el estado de conmoción interior el 21 de enero pasado, una medida excepcional que proporciona al gobierno mayores poderes para tratar emergencias de seguridad, como la que impacta a esta región.

Los tributos, que estarán en efecto desde el 14 de febrero hasta el 31 de diciembre de 2025, tienen como objetivo obtener los fondos necesarios para abordar las consecuencias de los combates entre grupos armados, entre ellos la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Estos conflictos han resultado en decenas de fallecidos y han forzado el desplazamiento de más de 50,000 personas, agravando la crisis humanitaria en la zona.

Tributos para costear soluciones inmediatas

Impuestos para financiar soluciones urgentes

El segundo gravamen, conocido como «Impuesto especial para el Catatumbo», impacta a las empresas que explotan hidrocarburos y carbón en el país. Estas entidades tendrán que abonar un 1% sobre las ventas de dichos productos, sin importar si se venden en el mercado interno o se exportan. Según lo definido en el decreto, los fondos recaudados a través de este impuesto estarán destinados únicamente a sufragar los gastos del Presupuesto General de la Nación vinculados a la gestión de la crisis en el Catatumbo.

Alarma interna y acciones extraordinarias

Estado de conmoción interior y medidas excepcionales

La declaración del estado de conmoción interior por parte de Petro permite al gobierno emitir decretos con fuerza de ley durante un periodo inicial de 90 días, prorrogable hasta dos veces, para hacer frente a emergencias graves. En el caso del Catatumbo, esta medida busca resolver los problemas de violencia derivados de los enfrentamientos entre el ELN y otros grupos armados que operan en la región. Estos choques han intensificado la inseguridad, afectando gravemente a las comunidades locales.

Un intento para afrontar la crisis humanitaria

Un esfuerzo para responder a la crisis humanitaria

La región del Catatumbo ha sido históricamente escenario de conflictos armados debido a la presencia de múltiples actores ilegales, como guerrillas, narcotraficantes y otros grupos armados organizados. La combinación de intereses económicos, como el control del narcotráfico y la explotación de recursos naturales, ha perpetuado la violencia en esta zona, que también enfrenta altos niveles de pobreza y abandono estatal.

Las medidas anunciadas por el presidente Petro buscan aliviar la crisis humanitaria y devolver la estabilidad a la región. Sin embargo, el éxito de estas iniciativas dependerá de la capacidad del gobierno para implementar de manera efectiva los recursos recaudados y garantizar la seguridad de las comunidades afectadas. Mientras tanto, la población del Catatumbo sigue enfrentando una compleja realidad marcada por el desplazamiento forzado, la violencia y la incertidumbre.

Por Araujo Gomes Igor

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